LAS BRAGUITAS OLVIDADAS

(Poesía humorística)

 

Ayer subí a mi azotea

para colgar mi colada,

y al entrar quedé asombrada

ante una imagen pigmea.

 

Todas las cuerdas vacías,

sólo unas bragas colgadas

ciertamente asexuadas,

que en el alambre yacían.

 

De tristeza y compasión

se cubrió mi alma al instante,

y en un ritmo trepidante

sucumbió mi corazón.

 

Las braguitas olvidadas...

¿A quién pertenecerían?

¿Quizás su dueño, algún día,

las dejó por desgarbadas?

 

Tal pena me dio aquel hecho

tan cruel como despiadado,

de dejar abandonado

a este ser tan indefenso,

 

que lo publico y condeno

por si alguien que lo lea

me puede dar una idea

para encontrar al obsceno.

 

Esta mañana he subido

por ver si seguían colgadas

las braguitas olvidadas...

que por ellas, no he dormido.

 

Y es que como son tan bellas,

y han quedado huerfanitas,

aunque no sean pequeñitas,

me quedaría con ellas.

 

Allí siguen, sin consuelo.

Gimoteándome al verme

me han dejado tan inerme,

que abandonarlas no puedo.

 

Ya no puedo aguantar más,

pues más no quiero sufrir.

Esto es un sinvivir,

así que las voy a adoptar.

 

Esperaré hasta mañana

por si apareciera el dueño

que abandonó en su desdeño,

a esta prenda puritana.

 

* * *

Fernando Cravioto

16/09/2017

 

 


Comentarios: 0