Atada a mí por amor

te sientes, mujer del alma,

y yo, atado sin remedio,

me siento por tu mirada.

 

Qué decirte con palabras,

qué, con letra desgreñada,

qué, que tú y yo no sepamos

al mirarnos a la cara.

 

Te quiero porque sin ti

mi vida no vale nada,

porque sin ti, vida mía,

no tiene sentido el alba.

 

Porque sin ti me consumo

y mi vida se me apaga.

No importa nada que sientas

que nuestra vida se pasa,

 

porque viviéndola juntos

es como estar siempre en casa.

Atada a mí por amor

te siento, mujer soñada.

 

* * *

Fernando Cravioto

19/03/2008

 


Escribir comentario

Comentarios: 0